Como resultado del creciente interés de los adolescentes por intervenir en las redes sociales cada vez con mayor rapidez y, en muchos de esos casos, con controles y supervisión acotados, ha instalado en las aulas de escuelas privadas una problemática que ya se viene advirtiendo como una nueva adicción.
De qué se tratan las nuevas problemáticas adictivas de los adolescentes en las aulas
Se trata de problemáticas que explotaron entre niños y adolescentes por su interés de intervenir en las redes sociales cada vez con mayor rapidez.
Se trata de la cosmeticorexia: un trastorno vinculado a la obsesión por el cuidado de la apariencia sin imperfecciones y el uso excesivo de productos cosméticos. En este sentido, basado en relevamientos realizados por la Asociación de Institutos de Enseñanza Privada de Buenos Aires (AIEPBA) se trata de una tendencia que "explotó" entre niñas y adolescentes.
Qué es la cosmeticorexia cómo afecta a los adolescentes
Los especialistas reconocen que la principal razón que puede derivar en cosmeticorexia está potenciada en las redes sociales, reels de Instagram y videos de TikTok, aplicaciones que leen a la perfección el interés de los chicos y los bombardean con contenido sobre la temática, ya que "lo aspiracional crea necesidad", sostienen los expertos.
En este marco, advierten además una necesidad cada vez más temprana de acceder a entornos donde se hace culto de la belleza, ya que la primera infancia también se ve involucrada en esta tendencia, llegando a absurdos festejos en un spa para niñas de 4 o 5 años, que incluyen tratamientos con cremas, que aunque recreativos comienzan a sembrar una preocupación excesiva por lo estético. En algunos adolescentes esta tendencia cala hondo y caen en un consumo desenfrenado de productos de belleza que no solo hieren su autoestima, sino también pueden dañar su salud dermatológica.
Es así que aparece el consumo desmedido por rutinas de skincare, uñas postizas, maquillaje, tratamientos de cabello e incluso inyecciones de ácido hialurónico y colágeno, llegando a cirugías estéticas.
Por ejemplo, al comienzo de la secundaria, hay chicas que van a la escuela con arqueador de pestañas para usarlo antes de salir al recreo o con uñas postizas y, en el caso de los varones, el cuidado radica especialmente en el pelo, con obsesión por los cortes, tinturas que antes no se veían en el colegio con tanta intensidad.
El boom de las apuestas deportivas: otra adicción que crece entre los adolescentes
Otra de las problemáticas que preocupa es un crecimiento desmedido de otra modalidad adictiva que estaría instalándose entre los alumnos de otras instituciones educativas: las apuestas deportivas online.
En este marco, la directora del Complejo Educativo Rubén Darío de Villa Ballester, Silvana Scarampi, dijo: "En secundaria notamos que las familias les habilitan cuentas de Mercado Pago para usar en el kiosco, en el viaje y tener plata para sus gastos, pero en muchos casos los chicos usan ese dinero en páginas de apuestas. Sabemos de chicos que ganan y pierden 70 o 90 mil pesos. En ellos se está creando un estímulo temprano por apostar que es riesgoso".
A su vez, el fútbol se convirtió en el primer canal de promoción. La invitación a apostar no es solo local: el usuario tiene cualquier liga del mundo a merced. A eso se le suma un entorno digital que también está invadido por las apuestas, ya que los influencers de moda que siguen los chicos, tanto streamers como tiktokers, comparten en sus redes códigos para comenzar a jugar.
Para finalizar, según explican desde AIEPBA ante estas nuevas realidades las aulas, hoy tienen que hacer "escuela de padres" para armar equipos y poder cuidar a los chicos entre todos.