La Corte Suprema de Justicia de la Nación finalizó durante los últimos días con su intervención en la causa por la contaminación de la Cuenca Matanza Riachuelo, la cual era conocida como "Mendoza" y había comenzado en 2004 contra 14 municipios, los gobiernos nacional, bonaerense y porteño y un total de 44 empresas.
La contaminación de la Cuenca Matanza Riachuelo ya no es atendida por la Corte Suprema
Ahora las denuncias por daño ambiental en sus ríos y arroyos no serán atendidas por el máximo tribunal de Justicia. Qué significa y por qué firmaron esa medida.
De esta manera, el máximo tribunal no va a atender más las denuncias por daño ambiental en el Río Matanza, el Riachuelo y sus respectivos arroyos y humedales ubicados tanto en el Oeste como en la zona sur y la Capital Federal, ya que "cumplió su propósito de generar la reforma estructural que resultaba imprescindible para alinear la actividad del Estado con los principios y derechos consagrados en la Constitución”.
Tal meta es fundamentada con la creación de la Autoridad homónima (ACUMAR), que "está en condiciones de ejecutar la política pública que desarrolla el mandato de garantizar un ambiente sano, equilibrado y apto para el desarrollo humano", y la aprobación del Plan Integral de Saneamiento Ambiental (PISA), que "fija los objetivos a llevar a cabo para lograr la recomposición del bien colectivo".
A su vez, la sentencia aclara que los expedientes vinculados a la continuación de la iniciativa continuarán su trámite "ante el juzgado que corresponda en razón del territorio y de la materia con aplicación de las normas procesales ordinarias pertinentes".
Las 11 empresas que dejaron de contaminar la Cuenca Matanza Riachuelo
A fines del año pasado, la ACUMAR reconoció a 11 firmas privadas asentadas en el partido de La Matanza que adecuaron sus procesos para que sean "amigables" con el medio ambiente y dejaron de contaminar los ríos y arroyos que desembocan en los cauces principales de la cuenca.
Estas compañías que pertenecen pertenecen a rubros como alimenticias, automotrices, metalúrgicas, curtiembres, textiles y construcción, entre otros, se excluyeron de una nómina que elaboró el organismo tiempo atrás para identificar a las que generaban algún tipo de daño al entorno luego de que constatara que sus valores estaban dentro de los parámetros aceptables.