Este lunes, 11 de noviembre, Haedo cumple 135 años desde su fundación y en el marco de su cumpleaños, Viví el Oeste conversó con Tony dueño de "Mario y la bicicleta colorada", un bar emblema de la localidad que nació en 1998 sobre la calle Carlos Tejedor y que hoy sigue en pie en Alberto Vignes 1014.
"Mario y la bicicleta colorada": un emblema de Haedo que se mantiene en pie
En el marco del aniversario N°135 de Haedo, conocé la historia de este comercio de la localidad que se caracteriza por la unión con la comunidad.
En dialogó con este medio, Tony explicó que la historia del bar se remonta a la década del '50, pero que su familia compró el fondo de comercio en el año 1998. En aquel entonces, su tío "nos dio una mano" porque su padre estaba pasando un mal momento de salud y esto les permitió iniciar los primeros pasos para comenzar su propio negocio.
"En el año 2003, nos mudamos de Carlos Tejedor a la calle Caseros, y fue en ese momento que decidimos renombrarlo como 'Mario', porque todo el mundo conoció a mi viejo andar en bicicleta repartiendo pedidos para todos lados", contó el comerciante. Al tiempo, en 2009 Mario fallece y la familia decide en 2013 mudase definitivamente a la calle Vignes 1014 y ponerle el nombre "Mario y la bicicleta colorada", en homenaje a su padre, quien se convirtió en un símbolo para toda la localidad.
Una historia compartida con Haedo
Para Tony, Haedo representa mucho más que un lugar de trabajo, es su hogar, identidad y un espacio de pertenencia. "La gente que viene es la que trabaja, labura en la zona. Apuntamos a esa gente, albañiles, plomeros, mecánicos, porque siempre quisimos que el lugar sea accesible y popular", sostuvo el vecino de la localidad, explicando el propósito detrás de su cocina sencilla y sin pretensiones.
Las calles de la localidad, sus cambios arquitectónicos y su comunidad acompañaron la vida de Tony, quien al hablar de su apego a lugar sostuvo: "La estación de Haedo me parece hermosa, es de las pocas cosas que todavía conservan ese estilo original inglés".
Sin lugar a dudas, "Mario y la bicicleta colorada" es parte de la historia de Haedo, un espacio que con el paso de los años sigue siendo un lugar de reunión y disfrute, donde vecinos y trabajadores se encuentran para compartir algo más que una rica comida.
Mario, un comercio sin pretensiones
El bar ofrece un plato de día que varía, desde pastel de papa hasta carne al horno, platos típicos y reconfortantes para los clientes habitúes. Además, en el menú se pueden encontrar opciones clásicas de minutas como milanesas, supremas, papa fritas. La clave de su éxito es la familiaridad y la accesibilidad: "Todos los platos tienen el mismo precio, para que sea práctico tanto para los clientes como para nosotros".
"Alguien dejó un comentario en Google diciendo que no queremos vender otra cosa, no es un lugar pretencioso y creo que esa sencillez es lo que la gente aprecia", sostuvo Tony.
Quienes deseen visitar el local pueden acercarse a Alberto Vignes 1014 de lunes a viernes de 12:00 a 14:30hs, y de miércoles a viernes de 20:00 a 23:00hs. Mientras que si quieren probar sus sandwiches deben dirigirse a Ciudad Jardín, Zeyen 6240, de miércoles a sábados de 11:30 a 15:00hs y sábados de 20:00 a 23:00hs.