Politica

Kicillof y Larreta se reúnen para avanzar en la apertura de la cuarentena

Horacio Rodríguez Larreta y Axel Kicillof empezarán a delinear a partir de las 9 de la mañana lo que será la reapertura progresiva de la cuarentena que comenzará a regir en el Área Metropolitana a partir del próximo lunes, una vez que culmine la fase estricta implementada en conjunto con la Casa Rosada con la que buscaron achatar la curva de contagios.

El jefe de Gobierno y el gobernador hablaron por teléfono a mediados de semana, y coordinaron el encuentro a solas de esta mañana en la sede del Gobierno porteño de la calle Uspallata, previsto para las 9. Será la primera de una serie de reuniones entre ambas administraciones antes de que se vean con Alberto Fernández, como cada víspera, para ultimar los detalles de la salida paulatina del aislamiento.

Lo admitió Ginés González García: “Creemos que en términos psicológicos, sociales y económicos va a haber una flexibilización”, aseguró el ministro de Salud, que además resaltó que las medidas que empezarán a regir a partir de la próxima semana se tomarán “en consenso” entre los gobiernos de la Ciudad y la Provincia, y bajo la supervisión y el visto bueno de la Casa Rosada.

FV JULIO EPU
LA PERLA LARGO

Es la segunda vez que Kicillof visita las oficinas del jefe de Gobierno de la calle Uspallata. La primera fue a principios de junio. Un gesto del gobernador para preservar la relación entre ambos. La devolución de Rodríguez Larreta fue quince días después: viajó hasta La Plata junto a Diego Santilli y Fernán Quirós.

La semana pasada, el crecimiento en el número de casos, que se había estabilizado en torno a los 2 mil en la Provincia y a mil en la Ciudad, y el temor a un desborde de las camas de terapia intensiva, llenó de tensión el vínculo entre ambas jurisdicciones.

Alberto Fernández, Axel Kicillof y Horacio Rodríguez Larreta durante el último anuncio de extensión de la cuarentena
Alberto Fernández, Axel Kicillof y Horacio Rodríguez Larreta durante el último anuncio de extensión de la cuarentena
En rigor, sucede cada vez que Rodríguez Larreta, Kicillof y Alberto Fernández empiezan a debatir la continuidad del confinamiento, y surgen trascendidos en torno a las medidas que planea instrumentar cada administración.

Ayer, el reporte oficial del Ministerio de Salud registró de todos modos una baja considerable en los nuevos contagios, tanto en la Ciudad como en la Provincia: 754 y 1.633, respectivamente. Y una ocupación del 59.5% de las camas de terapia intensiva en el AMBA, una de las variables que más preocupa a las autoridades políticas y sanitarias.

Como admitió González García, en la mesa de decisiones, a más de 110 días desde el inicio de la cuarentena, ya no prevalece solo la cuestión sanitaria. La crisis económica y social, y la variable psicológica, ahora juegan un papel relevante a la hora de decidir qué hacer y cómo seguir con el aislamiento.

En ese sentido, la ciudad de Buenos Aires filtró antes del fin de semana un cronograma de 12 etapas con la eventual reapertura progresiva de las actividades, como había anticipado este medio, a partir del próximo lunes.

Nadie sabe con certeza si la filtración fue adrede para presionar al gobierno bonaerense y a la Casa Rosada con la vuelta escalonada hacia “la nueva normalidad” o si fue un descuido. Lo cierto es que, según confiaron, en la reunión que encabezó el sábado con parte de su equipo, Rodríguez Larreta avisó que había pedido especialmente que guardaran con recelo la información, que en los últimos días circulaba de WhatsApp en WhatsApp entre una veintena de funcionarios porteños.

La entrada a la Ciudad, en Puente La Noria (Thomas Khazki)
La entrada a la Ciudad, en Puente La Noria (Thomas Khazki)
Lo cierto es que, más allá del objetivo de las filtraciones, el gabinete de la Ciudad trabaja desde hace más de una semana en la reapertura de actividades tal cómo funcionaban en la etapa anterior a la cuarentena estricta: es decir, la actividad física al aire libre y los comercios no esenciales que tuvieron que bajar sus persianas hace casi tres semanas: unos 70 mil locales. Siempre que el índice de contagiosidad -denominado R- se ubique en torno a 1, aclaran las autoridades sanitarias.

Se menciona incluso la posibilidad de que abren las peluquerías en el corto plazo, las industrias no esenciales y los comercios en zonas denominadas de “alto riesgo”. Y que más temprano que tarde se habiliten las reuniones sociales reducidas. En las siguientes etapas están contemplados los shoppings, los gimnasios, entre otras actividades.

La provincia de Buenos Aires no tiene un plan específico, en parte por la diversidad y la complejidad de los municipios del Gran Buenos Aires, que presentan distintas realidades. Pero en la semana, y más allá de las declaraciones cruzadas, desde la administración bonaerense avisaron que el plan de Kicillof también pasaba por empezar a abrir la cuarentena si es que la cuarentena estricta daba sus resultados.

El parte oficial de este domingo pareciera confirmar la tendencia. Rodríguez y el gobernador buscarán desde esta mañana empezar a ponerse de acuerdo en los trazos generales de la salida del aislamiento en el AMBA, una maratón de reuniones y discusiones que por momentos suelen empantanarse.

Fuente: Infobae