Durante varios años los vecinos del Oeste del Conurbano podían llegar hasta la zona turística de Puerto Madero viajando solo en tren. ¿Cómo hacían? Con un servicio especial que recorría la traza del Tren Sarmiento y que, entre las estaciones Caballito y Once, ingresaba en un angosto túnel que discurre bajo la Avenida Rivadavia. Ese pasadizo fue inaugurado en el año 1916 pero pocos porteños han circulado por él.
Tren Sarmiento: la historia del ramal a Puerto Madero
Este servicio especial de TBA recorría la traza del Tren Sarmiento desde Castelar hasta Caballito y luego ingresaba en un túnel hasta Puerto Madero.
Agosto de 1997 y en concordancia con el clima de época que imperaba en el país se lanzaba un titular que asombró a muchos. “De Castelar a Puerto Madero en 20 minutos” anunciaban los diarios. En ese momento TBA anunció el inicio de este recorrido del Tren Sarmiento que partiría del Oeste del Conurbano y antes de ingresar a Once, ingresaría en un túnel que corría en paralelo al de la Linea A de Subte. Luego cuando llegaba a Ingeniero Huergo volvía a la superficie hasta terminar su recorrido en la estación Puerto Madero.
El servicio funcionó durante algunos años y la idea de la empresa era que hubiera seis frecuencias diarias desde el Conurbano al centro porteño. En ese momento el boleto de ese servicio del Tren Sarmiento salía $3 (o dólares al cambio de la época) y entre las comodidades adelantadas a la época se podía mencionar el aire acondicionado, cafetería y teléfonos. Con el tiempo las formaciones comenzaron a detenerse también en las estaciones de Haedo y Ramos Mejía además de Castelar.
Sin embargo el ramal sufrió la crisis del 2001 cuando apenas iba tomando velocidad y el golpe fue muy duro. Los servicios adicionales del Tren Sarmiento (como la cafetería y el teléfono) fueron eliminados debido a los altos costos pero el precio del pasaje se intentó mantener estable. TBA reemplazó los conocidos coches “pitufos” (llamados así por su pequeño tamaño) y las frecuencias desde Castelar y otros puntos del Conurbano fueron discontinuadas durante esos años posteriores a la crisis económica.
En 2008 vivió el último auge con un servicio que llegaba hasta Merlo en el Conurbano y con más de 70 mil boletos vendidos según la CNRT. Pero el túnel nunca había estado pensado para un tren de gran tamaño y los problemas en la circulación, obligaron a detener las frecuencias. En 2012, tras el accidente de Once, TBA perdió la concesión de los ferrocarriles y el Ramal Castelar-Puerto Madero no volvió a ser utilizado para transporte de pasajeros.
Un túnel que data de los albores del Siglo XX
El túnel fue inaugurado en el año 1916 durante el gobierno de Victorino de la Plaza y un par de años después de la inauguración de la Línea A del Subte. La idea era tener un pasaje subterráneo que conectará el centro de la Ciudad con el Puerto de Buenos Aires. El túnel recorre el trazado de la Avenida Rivadavia en el mismo sentido que la Línea A. Incluso pasa por debajo de la Casa Rosada hasta desembocar en la estación de Puerto Madero.
El problema que siempre tuvo ese pasaje fue operativo. El lugar era muy angosto por lo cual solo podía circular un único ferrocarril en una dirección. En la época que conectó Castelar con Puerto Madero se utilizaba para viajar a la mañana desde el Oeste del Conurbano a la capital y a la tarde en el sentido inverso. La idea de ese servicio del Tren Sarmiento era descongestionar el tránsito porteño y que los pasajeros realizarán ese trayecto de cinco kilómetros en tren.
En la actualidad y tras la suspensión del servicio de pasajeros desde Castelar, el túnel es utilizado para la logística de la red ferroviaria. Sólo es utilizado por trenes de carga que se dirigen al puerto o vuelven de él y para el traslado de material rodante. Tras la construcción del Paseo del Bajo, se volvió prácticamente imposible que un nuevo tren de pasajeros haga el recorrido que se volvió furor en los 90 entre los vecinos del Conurbano.