Made in oeste

Made In Oeste: Neumáticos Rosmi, desde el oeste sobre ruedas a todo el país

Viví el Oeste Diario sigue contactándose con aquellas empresas insignias de la zona. Proyectos que se forjaron, crecieron y siguen aportando valor agregado a estas latitudes. En ese caso te presentamos Rosmi, la reconocida distribuidora de neumáticos Goodyear que actualmente cuenta con 11 sucursales en Buenos Aires. Conocé la historia apasionante de una familia emprendedora que desde San Antonio de Padua saltó a la fama con la vocación de servicio como marca característica.

Miguel Esmok junto a Rosana Cortés comenzaron con este proyecto hace 35 años. Un 1° de mayo en la actual sucursal de Haedo, sin autopista y con la “vieja Gaona” como escenario, ya atendían al primer cliente mientras se acomodaban para poder abrir. Esta dupla que trabajó durante 15 años de lunes a lunes le puso nombre a una de las grandes empresas de la zona: Rosmi.

FV JULIO EPU
LA PERLA LARGO

 

A Miguel y Rosana con el paso de los años se le sumó Mauricio y Mariano, sus hijos. Esa concepción de empresa familiar se sigue respetando al día de hoy y desde Rosmi la consideran uno de los pilares fundamentales de su éxito sostenido.

Visionarios, valientes, apasionados, algunas de los calificativos para describir a esta pareja que trabajó duro para destacarse con un nombre reconocible en el mercado desde sus jóvenes 20 años. “Esto era un galpón (sucursal de Haedo), con un terreno baldío, eran cuatro paredes, un par de chapas arriba y no mucho más. Lo limpiaron ellos, lo acomodaron y empezaron”, explica en diálogo con Viví el Oeste Mariano Esmok, quien actualmente es Gerente de Compras.

El menor de los hijos de Miguel, cuenta que la raíz de Rosmi se encuentra en San Antonio de Padua, de donde es oriunda la familia. La histórica casa “Neumáticos Marina” fue el lugar donde todo comenzó a forjarse. Este emblemático negocio dio el puntapié inicial de la mano de Oscar y Marina, los abuelos de Mariano.

Con una visión a largo plazo, las ganas de crecer y expandirse, Miguel pide ayuda para su familia y la familia de Rosana para comprar herramientas, algunos neumáticos usados e instalarse en el galpón de Haedo. Corría el año 1983 y de allí en más serán jornadas de 12 horas de trabajo o más, con Miguel en el taller y Rosana en la caja cuando salía de su otro trabajo. Unidos y convencidos de lo que hacían. Emprendedores como pocos.

 

Mariano relata que desde el primer momento su padre observaba la necesidad de fidelizar clientes para hacer crecer el proyecto incipiente. Veía potenciales clientes que podrían ayudarlo a afianzar esa gomería que se ubicaba en lugar estratégico de excelencia en los primeros años de la década del 80. En ese entonces ofrecían servicios de gomería, parche, balanceo o cubiertas de ocasión.

“Esos primeros años fue a puro pulmón. Recién después de dos años contrató a una persona que se llama Ricardo Escobar, que todavía está trabajando con nosotros en la sucursal de Merlo. Es el empleado más antiguo. Eso habla de la idiosincrasia de la marca”, resalta Mariano.

Rosmi se fue consolidando con el paso de los años y después de 15 años de actividad se convirtió en distribuidor de neumáticos Fate. Esto significó posicionarse de otra manera en el mercado. Significó un apoyo importante para seguir expandiéndose. Fue la confirmación de que todo el camino transitado en base a esfuerzo y esmero tenía su recompensa.

Es así como en el año 2000 abren la sucursal en Merlo y tres años después abrirían la tercera en Vila Luro. De allí en más Rosmi experimentaría un cambio cuantitativo y cualitativo que terminaría por generar la imagen actual que todos tenemos de esta empresa.

“La clave en el crecimiento es destacarnos por el servicio que le brindamos a la gente. Nuestra misión es que el consumidor tenga una compra de excelencia, ese es nuestro principal objetivo y tratamos de transmitírselo a nuestra gente”, analiza Mariano y agrega: “La calidad humana es otro de nuestros grandes valores. Lo que le trasmitimos a la gente que trabaja con nosotros es que deben hacerlo sintiendo que son dueños de cada una de las sucursales. Es fundamental”.

Haciendo un anclaje sobre la zona oeste, desde Rosmi reconocen que el tener presencia en Haedo, Merlo, Ramos Mejía, Moreno e Ituzaingó habla de ese sentido de pertenencia que tiene la familia y que no abandona, que los forma y que los atraviesa. Emprendedores primero y empresarios ahora hechos bajo la identidad del oeste.

“Creemos que el oeste tiene un potencial enorme. Está muy fidelizado el cliente de esta zona, por eso nos interesa seguir sumando puntos. La gente del oeste conoce a Rosmi como una empresa de servicio de calidad, por lo tanto nos demanda diferentes puntos para abrir sucursales”, define el actual Gerente de Compras.

Mauricio y Mariano vinieron a sumar valor agregado, vinieron a profesionalizar y expandir los horizontes de una marca que ya se mostraba sólida con varios años encima. Es así que como Rosmi se convirtió en una empresa pionera del rubro en venta por internet. Esto les permitió posicionarse como una marca de referencia que llegó a diferentes puntos del país.

Por otro lado, a la marcada orientación al consumidor final y la relación cara a cara con el cliente, se le sumó la oportunidad de atender grandes cuentas como pueden ser compañías de seguro. Fueron en busca de flotas. Fueron en busca de esos clientes que les faltaba. Todo predeterminado. Todo con un avance coherente. Todo esto sin abandonar es a impronta familiar que los destaca.

Apostar, invertir, crecer, un ciclo reiterativo en la marca que desde los comienzos se aplicó y en tiempos difíciles como los actuales sostienen. “En estos tiempos donde las empresas se contraen para reducir costos, nosotros estamos apostando. Tenemos una visión muy a largo plazo. Nunca nos achicamos. Sabemos que cuando el país vuelve a acomodarse, nosotros estamos bien parados para disparar rápidamente”, evalúa el menor de los Esmok.

Hay que destacar que a finales de octubre inauguraron la nueva sucursal en Ituzaingó y que para el año que viene planean hacer una fuerte inversión en el sector de marketing. Esto siempre acompañado por la innovación en el servicio que mutando con el paso de los años y que actualmente ofrece todas las alternativas al cliente en lo que refiere al tren delantero de los vehículos.

La de Rosmi es una de esas historias que vale la pena conocer y contar. Ingenio y superación constante. Constancia y convencimiento en sus posibilidades. Trabajo en equipo con una fuerte ligazón emocional que la diferencia de otras empresas. Del oeste y para el mundo. Los neumáticos que todos conocemos.