La Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) de Morón detuvo durante la madrugada de ayer a unos padres que están acusados de cometer horrorosas vejaciones en perjuicio de su hija por toda su adolescencia y parte de su infancia en la localidad de Mariano Acosta, al oeste del partido de Merlo.
Horror en Mariano Acosta: detuvieron a dos padres por violar y prostituir a su hija
La víctima denunció que sufrió las vejaciones desde los 8 hasta los 16 años por parte de su madre y padrastro y que la amenazaban para que "cumpla su contrato".
Según develó Infobae, la víctima habría empezado a padecer los abusos cuando tenía apenas 8 años, momento en el que su padrastro comenzaría a violarla reiteradas veces con la complicidad de su madre biológica, que incluso amenazaría a sus hermanos para que no se negara. Pero la pesadilla no terminaba allí.
La menor también aseguró que su progenitora permitiría el ingreso de otros hombres a su casa del barrio Agustín Ferrari para prostituirla y que no solo la forzaría a consumir droga, sino que además la registraría en fotos y videos para venderlos en las redes sociales y sitios de pornografía.
Sumado al relato de la chica, estudios en varios hospitales públicos determinaron que presentaba lesiones compatibles con este tipo de actos desde una temprana edad y trastornos alimenticios y psicológicos severos, teniendo en cuenta que los hechos se habrían extendido hasta que ella cumplió 16, cuando se escapó de la vivienda en cuestión.
El allanamiento y las detenciones en Mariano Acosta
Luego de que la fiscal Paula Hondeville, titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) Especializada en Violencia Familiar y de Género número 10 moronense, presentó todas las pruebas al Juzgado de Garantías N°1 de la misma jurisdicción, se realizó la inspección correspondiente y ambos imputados quedaron arrestados por el delito de "abuso sexual y corrupción de menores agravada, en concurso real con facilitación de la prostituciónde una menor".
A su vez, los detectives y efectivos de la Comisaría Sexta local de la Policía Bonaerense secuestraron celulares, tablets, computadoras, pendrives, discos rígidos externos, DVDs y CDs, filmadoras y cámaras fotográficas.