Un grupo de científicos de la Universidad Nacional de Moreno (UNM) se encuentra trabajando en una investigación sobre un futuro tratamiento para los niños con diabetes que presenten daños en los riñones a través de un novedoso tipo de células madre resistentes al estrés con diferenciación multilinaje (muse, por sus siglas en inglés).
Científicos de la Universidad de Moreno desarrollan un tratamiento para la diabetes
El proyecto busca crear una terapia que permita abordar el daño que causa la enfermedad en los riñones de los niños a través de un novedoso tipo de células.
Las mismas se encuentran en el tejido mesenquimal humano adulto y se extraen del cordón umbilical (entre otras fuentes de obtención), pero lo que se está estudiando en la institución académica del Oeste es si podrían sanar los órganos digestivos heridos por la mencionada enfermedad.
Esta posibilidad radica en que las muse secretan distintos factores que ayudan a que las células sobrevivan en el riñón y se reparen, por lo que se espera que así se eviten las infecciones renales crónicas en un contexto donde hay 30 mil pacientes en diálisis y 5 mil que esperan un trasplante en la República Argentina.
Desde la entidad morenense aseguraron que "se enorgullecen en formar y apoyar investigadores que, a través de su trabajo y dedicación, puedan avanzar en iniciativas que generen conocimiento para lograr mejorar la calidad de vida de los ciudadanos de nuestro país".
La palabra de uno de los científicos de la Universidad de Moreno
Andrés Orqueda es el líder de un equipo que además posee a Diego Riva, Bárbara Espindola, Débora Garanzini, Sandra Salinas y Leonardo Romorini y explicó que "la diabetes puede generar un montón de complicaciones y una de ellas es el daño renal", razón por la que buscan "restaurar esa función que cumplen estos órganos y que se ve alterada negativamente como consecuencia de la enfermedad”.
“Básicamente, lo que hace es filtrar el contenido de la sangre y eliminar los desechos metabólicos del cuerpo a la orina. Entonces, cuando hay un daño renal, estos no son descartados correctamente y quedan en la sangre. Lo que nosotros queremos estudiar es una terapia celular que detecte de forma temprana una lesión que podría ser crónica y no desembocar en la diálisis o el trasplante”, completó.