Un día como hoy, pero de 1959, el entonces Papa Juan XXIII proclamó a la Virgen Viajera de Loreto como la protectora de la Diócesis de Morón, que también abarca a los municipios de Ituzaingó y Hurlingham ya que en ese momento solo eran localidades, y luego del Partido en su totalidad.
Sin embargo, la relación del Distrito con la también llamada Inmaculada Concepción del Buen Viaje comenzó en el siglo XVII, cuando uno de los fortines colocados para defenderse de los malones se apostó junto a un pequeño oratorio en su honor, debido a que el mismo era paso obligado hacia el norte y el oeste nacional para que los viajeros le recen cuando iban (para que los proteja) y regresaban (en agradecimiento).
Tiempo después, los Jesuitas que la tenían por patrona llevaron a ese pequeño espacio su devoción con el nombre de Nuestra Señora de Loreto o del Buen Viaje, instalando allí una imagen labrada por ellos y que es la misma que se puede ver en la actual Catedral moronense.
A su vez, en 1727 Don Francisco de Merlo hizo levantar en su hacienda un oratorio personal para uso de su familia y sus colonos en su honor y hacia 1730 el Cabildo Eclesiástico de Buenos Aires dispuso construir una parroquia en ese punto, pero la obra recién se concretó en 1776.
El derrumbe y el milagro en Morón
El templo se deterioró con el correr de las décadas y en 1852 se derrumbó casi por completo, pero milagrosamente la silueta de la virgen quedó intacta y fue derivada a la iglesia hoy en día localizada sobre la calle Belgrano al 327.
Casi 100 años más adelante, Juan XXIII consagró a Nuestra Señora Inmaculada del Buen Viaje como patrona principal de la Diócesis local un 15 de abril de 1959, mientras que el 19 de noviembre de 1961 su investidura pasó a ser protectora de todo Morón.