Un 15 de abril, pero de 1959, el Papa Juan XXIII proclamó a la Inmaculada Concepción del Buen Viaje como la patrona principal de la Diócesis de Morón, que también abarca a los partidos de Ituzaingó y Hurlingham ya que por ese entonces no se habían municipalizado y solo eran localidades.
El vínculo con la también llamada Virgen Viajera de Loreto se remonta al siglo XVII, cuando uno de los fortines colocados como defensa de los indios se apostó en el actual territorio moronense y más tarde se instaló un pequeño oratorio por ser paso obligado hacia el norte y el oeste. Allí rezaban los viajeros al marchar hacia esas regiones y también cuando regresaban en agradecimiento a ella.
Tiempo después, los Jesuitas que tenían por patrona a la Virgen Viajera de Loreto llevaron al lugar su culto con la denominación de Nuestra Señora de Loreto o del Buen Viaje, instalando en la humilde capilla una imagen labrada ellos y que es la misma que se puede ver en la Catedral de Morón.
En 1727, Don Francisco de Merlo hizo levantar en su hacienda de aquel pago un oratorio para uso de su familia y sus colonos en su honor y para 1730 el Cabildo Eclesiástico dispuso construir una parroquia en ese sitio, pero la obra recién se concretó en 1776.
El derrumbe y el milagro en Morón
El templo en cuestión se fue deteriorando con el paso de los años y en 1852 se derrumbó casi por completo, pero la Virgen quedó intacta y fue derivada a la iglesia actualmente localizada sobre la calle Belgrano al 327.
Casi 10 décadas más adelante, Juan XXIII consagró a Nuestra Señora Inmaculada del Buen Viaje como patrona principal de la Diócesis local un 15 de abril de 1959, mientras que el 19 de noviembre de 1961 su imagen pasó a ser, además, protectora de todo Morón.