En una declaración que ha desatado intensas reacciones en el mundo, Donald Trump anunció su intención de reabrir la cárcel de Alcatraz, cerrada en 1963, para alojar a los delincuentes “más violentos” y a los migrantes que hayan ingresado ilegalmente al país. El mandatario afirmó en su red Truth Social que la isla es un símbolo de “orden y justicia” y que su reapertura sería un paso hacia la restauración de la “grandeza estadounidense”.
Mundo: así es la histórica cárcel de Alcatraz que Donald Trump quiere reabrir
El mandatario, Trump, busca revivir la histórica cárcel de máxima seguridad del mundo como prisión para criminales y migrantes ilegales.
Así es la cárcel de Alcatraz, una de las más seguras del mundo
Ubicada en la bahía de San Francisco, Alcatraz fue originalmente bautizada por el español Juan Manuel de Ayala en 1775 como “Isla de los Alcatraces”, en referencia a los pelícanos que poblaban la zona. No sería hasta 1850 cuando el gobierno estadounidense la transformaría en una base militar, y más tarde, en 1934, en la cárcel federal más segura del país. Rodeada por aguas heladas y fuertes corrientes, el aislamiento natural de esta prisión que sorprende en el mundo, era considerado un disuasivo casi infalible contra las fugas.
Durante sus tres décadas como penitenciaría, Alcatraz albergó a figuras como Al Capone y “Machine Gun” Kelly. Su fama se cimentó tanto por sus estrictas condiciones como por sus intentos de escape, la mayoría fallidos. Sólo tres hombres, los hermanos Anglin y Frank Morris, lograron una fuga tan ingeniosa que hasta hoy permanece envuelta en el misterio. A pesar de las décadas transcurridas, su paradero sigue sin confirmarse, alimentando la leyenda de “La Roca”.
El costo económico de la prisión de Alcatraz
El elevado costo operativo fue uno de los principales motivos por los que la cárcel fue cerrada en los años sesenta. En su época, Alcatraz costaba tres veces más que otras cárceles federales debido a su difícil acceso y la necesidad de transportar miles de litros de agua potable cada semana. Desde 1973, la isla funciona como museo administrado por el Servicio de Parques Nacionales y atrae a más de un millón de turistas al año.
Reactivar Alcatraz como prisión supondría no sólo una inversión millonaria, sino también una redefinición del enfoque carcelario en Estados Unidos. Críticos argumentan que la propuesta de Trump tiene un fuerte componente simbólico y electoral, enmarcado en su discurso de “mano dura” contra el crimen y la inmigración en el mundo. Sea como fuere, la idea vuelve a poner a esta icónica isla en el centro del debate nacional sobre justicia, memoria y seguridad.