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A 43 años del recorrido de Juan Pablo II por el Oeste y su pedido de paz por Malvinas

En medio de su viaje relámpago a Argentina, el Sumo Pontífice viajó en el Tren Sarmiento y dar una misa en la Basílica de Luján.

El 1982, en medio del conflicto de la Guerra de Malvinas, Argentina recibió la visita de Juan Pablo II, quien aterrizó en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza en la mañana del 11 de junio. El Sumo Pontífice tenía como fin dar una misa en Luján, y para ello recorrió varias localidades del Oeste.

Tras llegar al país, con el fin de pedir por la paz en medio del conflicto bélico, el Papa Juan Pablo II brindó una misa en la Catedral Metropolitana de Buenos Aires, para luego emprender viaje hacia la Basílica de Luján.

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El Sumo Pontífice circuló a bordo de su papamóvil por un tramo de Avenida Rivadavia, pasando por Haedo y Morón rodado de miles de fieles que se apostaron tanto en la vía pública como en los balcones y terrazas de los edificios aledaños para saludarlo.

El viaje del Papa en el Tren Sarmiento

Luego de un encuentro el entonces intendente, Ernesto Rodríguez y el obispo de Morón, Justo Oscar Laguna, quienes le regalaron una placa y la imagen de la Virgen del Buen Viaje tallada en plata, el Papa se subió al andén sur de la estación para abordar una formación especial que lo llevaría a Luján.

Para aquel momento se vendieron pasajes alusivos y se dispuso de un coche acondicionado especial para la ocasión, que hoy en día forma parte del Tren Museo Itinerante. De esta manera, Karol Józef Wojtya, pasó por Castelar, Ituzaingó, San Antonio de Padua, Paso del Rey, Moreno, La Reja, Francisco Álvarez y General Rodríguez.

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El Papa fue recibido en el Oeste por una multitud

Miles de fieles recibieron a Juan Pablo II no solo en Luján para la misa sino también en varios puntos del Conurbano bonaerense y fue un día que quedó grabado en la memoria de la comunidad.

Una vez en Luján, el Sumo Pontífice dio una misa y pidió por el fin de la Guerra de Malvinas "en la paz, la justicia y el respeto de la dignidad de cada nación". Su solicitud se hizo efectiva solo 48 horas más tarde, cuando el Gobierno militar se rindió.