Las divisiones de Lavado de Activos, Cibercrimen y Pericias Informáticas de la Policía Federal Argentina (PFA) desbarató durante las últimas horas una banda que se dedicaba al contrabando de perros que hacían carreras clandestinas y tenía asiento en un total de seis localidades y tres municipios del Oeste.
Múltiples allanamientos en el Oeste por venta de perros para carreras clandestinas
Los animales eran enviados al exterior mediante maniobras aduaneras ilegales. Hubo allanamientos en veterinarias, guarderías, criaderos y oficinas de mudanzas.
Las pesquisas surgieron a raíz de una denuncia presentada el año pasado por la Aduana que especificó una serie de maniobras por parte de empresas que realizaban exportaciones de animales con una finalidad meramente comercial, pero utilizaban la excusa de que en realidad se trataba de "mudanzas" para hacerlo fuera de la normativa vigente y sin los aranceles correspondientes.
Tal acusación derivó en 10 allanamientos donde se identificó una organización integrada por veterinarios, despachantes y agentes de transporte que falseaban documentación para exportar los canes vivos ocultando a los verdaderos dueños para reducir los valores de los impuestos a pagar, ya que la camuflaban como un envío particular.
Así fue como la Secretaría número 8 del Juzgado Nacional en lo Penal Económico N°4, a cargo de los doctores Cristina Martha Bislis y Alejandro Catania, respectivamente, ordenó la profundización de la investigación para terminar de desarticular esta asociación ilícita.
Los nuevos operativos en el Oeste
Como consecuencia, los detectives llevaron a cabo un operativo simultáneo en 26 inmuebles de la región y otros puntos de la provincia de Buenos Aires y la Capital Federal, tales como clínicas, guarderías, criaderos y oficinas de carga de las ciudades de Francisco Álvarez, La Reja, Paso del Rey, El Palomar, Castelar y San Miguel.
El resultado del procedimiento fue el secuestro de facturas, 7.800 dólares en efectivo, teléfonos celulares y computadoras con información importante para la causa que permitieron corroborar el modus operandi apuntado desde un principio, por lo que dejaron ese material a disposición del magistrado interventor por el delito comúnmente conocido como "contrabando".