A un día del anuncio oficial por parte del Gobierno nacional acerca de la eliminación del Programa de Crédito Argentino del Bicentenario para la Vivienda Única Familiar (PROCREAR), ya se sabe lo que va a pasar con las más de 4 mil casas que quedaron sin concluir en el Oeste.
¿Qué pasará con las más de 4 mil viviendas del ex PROCREAR en el Oeste?
Miles de desarrollos urbanísticos todavía no se terminaron o están adjudicados, pero no comenzaron a construirse. La intención del Gobierno para con ellos.
Estos desarrollos se ubican en las localidades de El Palomar (Morón), Martín Coronado (Tres de Febrero), Ciudad Evita y Gregorio de Laferrere (La Matanza), San Miguel y General Rodríguez y suman un total de 4.243 unidades habitacionales. Todos ellos empezaron a construirse a excepción del caso matancero, que solo fue adjudicado por la gestión anterior.
Sin embargo, a partir de los primeros meses del corriente año quedaron paralizados tras el recorte a la financiación de los trabajos sin importar el porcentaje de avance que tenga cada uno y los sorteos que ya se realizaron o estaban próximos a llevarse a cabo, por lo que la incertidumbre respecto a su futuro crece.
La decisión del Gobierno para los domicilios faltantes
De acuerdo al decreto de necesidad y urgencia (DNU) publicado ayer, ahora será el Tribunal de Tasaciones de la Nación el encargado de ponerles un precio y el Estado podrá transferirlas a provincias, municipios o directamente volcarlas al sector inmobiliario.
“Se fomentará la venta de los terrenos del fondo disuelto para que los hogares terminados o en obra puedan ser introducidas al mercado y vendidas para ampliar la oferta”, sentenció al respecto el Ministerio de Economía en un comunicado oficial.
En la resolución, el presidente Javier Milei expresó que el PROCREAR “no ha sido transparente, ni ágil, ni eficiente en la atención del bien común, generando gastos innecesarios al erario público” y citó un informe de la Sindicatura General de la Nación (SIGEN) que habría dado cuenta de la “demora en la entrega de los lotes, lo cual genera mayores costos de mantenimiento, vigilancia y expensas que podrían haberse evitado”.