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Se reavivan las críticas a los colectivos “truchos” tras un accidente en González Catán

Un colectivo “trucho” se quedó sin frenos y se llevó puesto un colectivo de la línea 96, el pasado jueves frente al predio del Campo Santiagueño de González Catán.  El accidente que afortunadamente no dejó heridos de gravedad volvió a desatar el debate sobre el accionar de colectivos truchos que transitan los diferentes barrios de La Matanza.

El choque entre un interno Nº28 de la línea 96 y un colectivo trucho en González Catán, fue el disparador para que se vuelva a poner el foco sobre el andar de estos vehículos en la Matanza. Sin seguro, habilitaciones pertinentes para transportar pasajeros y en pésimas condiciones, estas unidades trasladan a diario a gran cantidad de pasajeros.

Para las familias que viven retiradas de las avenidas, las principales calles de los barrios, en las zonas más inaccesibles, se tratan de un servicio esencial teniendo en cuenta que muchas veces, estos colectivos “truchos” se mueven con un recorrido propio y diferente a la de las líneas de colectivo.

FV JULIO EPU
LA PERLA LARGO

Sin embargo, son muchos los que sostienen que “son un peligro”. Ariel, delegado de la línea 96, señala que “la gente que se toma esos servicios sabe lo que está haciendo, no tiene seguro ni cobertura de nada”. Según relato el colectivero, la mayor cantidad de los heridos en el choque fueron del colectivo “trucho”. “Ahí nadie responde por ellos, no saben de donde agarrarse, eso se sabe antes de subir

Según explica el delegado, en muchas ocasiones los pasajeros utilizan este servicio porque no tienen crédito en la tarjeta SUBE y allí puede pagar con billetes directamente al chofer. Lo cierto es que su funcionamiento se volvió regular con el correr de los años y es común ver a todas horas del día estos colectivos.

Ante este tipo de accidente se pone de manifiesto el peligro al que se exponen quienes se deciden viajar con este colectivo y también terceros como fue el caso del chofer y los pasajeros que iban a bordo del interno de la línea 96.

Lejos de cualquier regulación y ante los ojos de todo, siguen funcionado de manera polémica y llamativamente sin ningún tipo de apercibimiento.