El Observatorio Robótico Antártico de Argentina está ubicado en la Base Belgrano II, la más austral de las bases antárticas argentinas y ya completó la instalación de su cúpula automatizada. El proyecto es una cooperación entre el Instituto Antártico Argentino, el Instituto de Astronomía y Física y la UNAHUR.
UNAHUR: ya se instaló la base para observar exoplanetas
El proyecto es liderado por el Dr. Mario Melita, docente de la UNAHUR y comenzó en febrero del 2020.
La idea de este nuevo observatorio es usarlo para aprovechar la noche polar para estudiar exoplanetas y otros cuerpos celestes, que son de difícil acceso desde otras latitudes. La base está ubicada a unos 1.300 kilómetros del Polo Sur y a casi 5.000 de Buenos Aires en una posición en la que recibir cualquier tipo de ayuda en otro momento del año es casi imposible.
Las tareas de instalación se llevaron adelante durante la visita a esa base Argentina del rompehielos Almirante Irízar, que todos los veranos aprovecha una ventana climática entre la segunda quincena de enero y la primera de febrero que le permite navegar un canal que se abre entre la barrera de hielo y el mar congelado para acercarse hasta unas 15 millas del emplazamiento.
En la instalación participaron ingenieros, técnicos de la Dirección Nacional del Antártico (DNA) y efectivos del Comando Conjunto Antártico (Cocoantar) de las Fuerzas Armadas. La dotación de la Base Belgrano II cuenta con 11 efectivos del Ejército, 2 de la Armada, 1 de la Fuerza Aérea, uno de la Dirección Nacional del Antártico y dos del Servicio Meteorológico Nacional.
El trabajo de la UNAHUR para la base Argentina
El proyecto es liderado por el Dr. Mario Melita, docente de la UNAHUR y comenzó en febrero del 2020. A comienzos del año, se había completado la primera fase del proyecto con la instalación de la base de la cúpula en la base Belgrano II. Esto se trata de una iniciativa pionera, cuyas producciones resultarán de gran interés para la comunidad astronómica.
Para albergarlo se construyó una cúpula que contará con sistema de motorización y automatización realizado en la universidad de Hurlingham, el observatorio estará apoyado sobre una base de hierro galvanizado, que ya está instalada en el suelo antártico.