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Susto en pleno centro de William Morris por el incendio de una remisería

El fuego consumió gran parte del interior del local y las causas todavía no están claras. Los Bomberos de Hurlingham evitaron que se propague a otros comercios.

Un preocupante y peligroso incendio se dio durante la tarde de ayer en pleno centro de la ciudad de William Morris, al norte del partido de Hurlingham, que no pasó a mayores gracias a la rápida intervención de los Bomberos Voluntarios locales y al alerta de los vecinos de la zona.

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El foco ígneo se desató en una remisería ubicada sobre la calle Planes al 1.800, entre Potosí y Andrés Arguibel y a la vuelta de la estación homónima del Tren San Martín, y contó con la intervención de una dotación del cuartel central, que movilizó hasta allí la autobomba denominada "H21".

Como el fuego comenzó en el interior del inmueble, los agentes debieron traer equipos especiales para poder ingresar y combatirlo más de cerca con el riesgo de que se propague a los negocios linderos, aunque por fortuna no sucedió y tampoco se reportaron heridos. Eso sí: el local llamado "Luján" quedó muy dañado y las causas todavía no están claras.

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LA PERLA LARGO
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El interior de la remisería incendiada en William Morris.

El interior de la remisería incendiada en William Morris.

Otro reciente incendio en Hurlingham

Hace alrededor de cinco meses, un colectivo que se trasladaba por la Avenida Gobernador Vergara al 2.500, entre las calles Wolf Schcolnik y Sargento R. Castillo y a metros del Centro Cultural Leopoldo Marechal, comenzó a prenderse fuego cuando el reloj marcó las 7 de la mañana.

Se trataba del interno número 168 de la Empresa del Oeste Sociedad Anónima de Transporte (EDO SAT), que en ese momento cumplía con su servicio regular en dirección del municipio de San Miguel y quedó inutilizable producto de la intensidad del foco ígneo.

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Pese a que se desconocen los motivos, intervinieron un par de móviles de los efectivos hurlinghenses (una del cuartel central y otra del primer destacamento) para extinguir las llamas y evitar que se propaguen a vehículos linderos, algo que no terminó ocurriendo gracias a su rápido accionar.