A fines de la semana pasada, una abuela de 90 años había aparecido sin vida en la localidad de El Palomar, al norte del partido de Morón, luego de padecer un robo y ser maniatada por los delincuentes y apenas tres días después el hecho de inseguridad volvió a repetirse, pero esta vez en la ciudad de Villa Luzuriaga.
Otra jubilada murió tras una entradera en el Oeste
Al igual que sucedió el viernes pasado en El Palomar, la señora de 69 años fue encontrada por su yerno sin vida y con faltante de varias pertenencias.
Según las fuentes consultadas por Viví el Oeste, este nuevo caso tuvo lugar sobre la calle Buchardo al 5.800, entre Lisboa y Bruselas y al noreste del municipio de La Matanza, del barrio Los Pinos y la víctima fue identificada como Francisca Hidalina Verón (69).
La señora resultó hallada muerta en su cama y con hematomas en ambas muñecas por su yerno, quien manifiesto que en reiteradas oportunidades trató de mantener comunicación telefónica con ella y al no obtener respuesta se hizo presente en su domicilio, donde descubrió la horrorosa escena.
A su vez, el hombre aseguró que, además de los signos de violencia, en la casa faltaban tres televisores y numerosos objetos personales, razón por la que la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio (UFIJ) Especializada en Homicidios Dolosos del Departamento Judicial local caratuló la causa como "homicidio en ocasión de robo" y dispuso la búsqueda de los responsables.
Las similitudes con el anterior caso en El Palomar
En el episodio del 21 de marzo la víctima también yacía en su dormitorio con su mano derecha atada con un precinto, mientras que la vivienda (situada en la arteria Mariano Escalada al 2.800) estaba revuelta y la puerta delantera forzada.
De acuerdo a la información brindada por TN, serían dos los delincuentes que habrían ingresado y explicaron que por el momento se desconoce la razón del fallecimiento de la moradora, pero que la principal hipótesis es que se debió al estrés provocado por la entradera.